*Este texto fue reconocido a partir de una grabación de audio utilizando inteligencia artificial, por lo que puede contener errores. Si nota inexactitudes o desea mejorar el texto, puede ayudar editando el documento en el enlace a continuación.
Había una pregunta sobre la alimentación. Hace unos años, empecé a comer más comida cruda con la intención de sanar mis órganos y como una forma de explorar diferentes opciones. Al llegar aquí, me di cuenta de que tenemos muchas opciones de carbohidratos y carne en nuestro menú, y me gustaría saber si la alimentación es importante. En realidad, no es tan crucial. ¿Cómo podemos determinar qué es una alimentación sana?
No hay una respuesta definitiva, depende de cada individuo y de cómo conectan con los alimentos. Conozco personas que han comido carne toda su vida y han vivido 130 años, y otros que han sido vegetarianos y también han vivido mucho tiempo. Todo depende de cómo cada uno se siente. Lo que ofrecemos en nuestra dieta es temporal, cada uno debe ajustarse según su sentir. Por ley natural, cualquier exceso conlleva desequilibrios, y lo que buscamos con estas conversaciones es que comiences a despertar tu sensibilidad y encuentres tu propio equilibrio. Existe una dieta ancestral que consiste en solo plátanos una o dos veces al día, sin excesos, ya que el cuerpo se está depurando. Después de esa etapa, es importante incluir en la dieta una variedad de alimentos, como vegetales y carne, para no caer en hipocresía ni contradecir lo que transmitimos. Cada uno debe decidir por sí mismo. Aquí observamos que muchos comen mucha fruta, a pesar de nuestras advertencias sobre el exceso de fructosa, pero siguen consumiéndola. En nuestro espacio, lo único prohibido por principio universal es el exceso. Este podría neutralizar los efectos de la dieta después de estar en contacto con plantas o fármacos.
Del centro, en los 18 años hemos visto varios ejemplos y anécdotas, incluso he conocido veganos y vegetarianos con años de experiencia que estaban así. Pero al terminar la dieta, lo primero que pedían con manos temblorosas era «la gallina de chacra, la gallina de chacra. Hay que hacer caldo, mi cuerpo quiere carne». No es cuestión de decir si eso está bien o mal, no hay que juzgarlo, simplemente a veces uno se hace vegano o vegetariano por cuestiones mentales, por moda, por un concepto. Sin embargo, a la hora de seguir una dieta, al empezar a restablecer tu sensibilidad, tu cuerpo empieza a manifestar lo que necesita, por lo tanto debes darle lo que te pide. Es importante no aferrarse a conceptos existentes en ese momento, sino permitir que la sensibilidad te indique lo que tu cuerpo necesita, porque a través de una alimentación intuitiva encontrarás lo que realmente tu cuerpo necesita. Es un proceso que depende del arte propio de cada individuo, es el arte de sentir y ahí radica el cambio. Algunos que solían comer tres o cuatro veces al día porque era considerado saludable, pueden cambiar a comer solo dos veces al día porque eso les conecta más, quieren comer de forma distinta, y esto es parte del arte de cada uno.En todo aspecto es importante sentir y no debe haber conflictos internos, ni represiones, porque si algo, aunque sea mínimo, genera un conflicto, estarás creando una barrera interna. Todo debe fluir naturalmente. ¿Sientes eso? ¿Y el ají, por qué el ají? No está permitido mientras estés en la dieta porque al reestructurar tu flora intestinal purificas el cuerpo y si hay alguna herida interna, también la estás tratando. El ají es irritante, y aunque tiene muchas propiedades, para un cuerpo sensible que está renaciendo, ese «golpe» de sabor no es recomendable. Si estás tomando una planta,
Para poner un poco de contexto, imagina que tienes un vaso de jugo de naranja, un vaso de agua, y un vaso de aji. ¿Cuál vas a probar primero? De hecho, al beber el vaso de aji primero, ocupará espacio en tu estómago que podría beneficiar a tu sistema digestivo. Por lo tanto, se recomienda cuidar esta zona para que tu cuerpo conecte con la comida de la mejor manera. Después de 15 días o un mes, cuando hayas terminado todo, quizás no sientas la necesidad de seguir comiendo de esa forma, pero si tienes problemas digestivos debes estar atento a lo que comes.